Patricia Tórtola | Foto: Torrent Al Día
Patricia Tórtola (Torrent, 1995) nunca olvidará esta semana que ya termina. El martes recibía las notas finales de 4º de Odontología, con todo aprobado, y el miércoles le comunicaban que era una de las 20 colegiadas seleccionadas para arbitrar la próxima temporada en la Primera División del fútbol femenino. No se lo podía creer, pero el sacrificio de los últimos meses para compaginar sus estudios universitarios con la preparación de las exigentes pruebas técnicas y físicas del Comité de Árbitros había valido la pena.
“Todo sacrificio tiene su recompensa y ahora es un gran reto para mi debutar en Primera, debo demostrar todo lo que he trabajado y que tengo el nivel para estar ahí”. Así, como un desafío, se plantea esta joven y ambiciosa colegiada su estreno en la máxima competición nacional. Será la única representante valenciana de las tres que presentó el Comité de Árbitros, y su carácter le empuja a querer más: “Mi próximo reto es llegar a pitar partidos internacionales o, incluso, categorías masculinas”.
Cuando, con tan solo 12 años, cambió su equipación de futbolista por el silbato de árbitro “para vivir el fútbol desde otra perspectiva”, como ella misma explica; le hicieron una pregunta que no ha olvidado y que le ha guiado para hacerse un hueco en esta complicada y siempre criticada profesión de árbitro. “Cuando me apunté con mi hermano para sacarme la licencia me preguntaron si yo era valiente y claro que lo soy, sobre el césped hay que tener valentía, si no te comen”.
Aun así, asegura que nunca ha tenido ningún problema en ningún partido: “Nunca me ha sucedido nada que no pudiese soportarse. Hay gente pesada, pero son cosas aisladas que vienen en el oficio del árbitro y que son habituales en el fútbol”.
Y aunque reconoce que las mujeres tienen más barreras para prosperar en el mundo del arbitraje, confiesa que siempre se ha sentido arropada por el Comité Valenciano: “Siempre me han ayudado y me han ofrecido oportunidades para subir de categorías”, pero añade: “Hasta que tú misma no eres consciente de lo que realmente puedes conseguir, no te esfuerzas al máximo para alcanzar tus sueños”.
Confía en que el futuro para las mujeres árbitros es alentador y tiene la esperanza de que la situación se normalizará con los avances de los últimos años. “Que la Primera División femenina pudiese ser arbitrada íntegramente por mujeres –como sucederá a partir de la próxima temporada- era algo impensable no hace mucho, así que ahora cualquier cosa puede suceder”, y concluye: “Es un reto, pero por fin nos están dando a las mujeres la importancia que tenemos en el fútbol y en el arbitraje”.
Texto: FFCV